Para mantener una piel lisa y joven tan importante es cuidarla con cremas hidratantes como mantenerla limpia a diario. Los factores externos, como la contaminación, o los internos, como el estrés, hacen que la piel pierda vitalidad. Si bien es cierto que muchas mujeres saben la importancia de la limpieza y llevan a cabo un buen ritual de desmaquilado por las noches, muchas de ellas se olvidan de su importancia también por la mañana.
En palabras de Marta Gamarra, directora de formación de Eve Lom España, "durante la noche se incrementa la secreción de grasa de la piel, por ello es recomendable realizar una limpieza cada mañana que elimine ese exceso de grasa, devolviendo así su luminosidad y, sobre todo, su juventud, ya que esta rutina no se trata de una cuestión de edad sino de calidad de la piel. Sin una piel perfectamente limpia, incluso los mejores tratamientos pueden resultar en vano. Si los poros están obstruidos, los principios activos incorporados en las cremas difícilmente van a ser absorbidos en la superfície con el fin de alcanzar las capas más profundas de la piel y ejercer su acción. Por lo tanto, la limpieza facial es indispensable para lucir una piel radiante y sin impurezas".
Los consejos de Marta Gamara...
¿Cuál sería el primer paso de nuestro ritual de belleza matinal?
En primera lugar, limpiamos el rostro con un limpiador suave que respete la piel y equilibre el pH. La firma Eve Lom cuenta con una limpiadora ideal para el ritual de la mañana: Morning Cleanser. Para su aplicación, sólo se necesita calentar una pequeña cantidad de producto en la palma de la mano y aplicarlo sobre el rostro con movimientos circulares. Dejamos actuar durante dos minutos y seguidamente retiramos con agua.
Una vez limpia la piel, ¿En qué orden debemos aplicar el resto del tratamiento?
Aplicamos el tratamiento adecuado (según el tipo de piel y la edad) en el siguiente orden: contorno de ojos, sérum y crema. Una vez que la piel ya está preparada, podemos maquillar o aplicar un factor de protección que la proteja de los agentes externos.
¿Cuáles serían los efectos a medio que se reflejarían en nuestra piel como consecuencia de una limpieza insuficiente o inexistente?
Si no se realiza una limpieza adecuada, la piel se mostrará poco a poco apagada y cetrina. Empezaremos a acumular impurezas o puntos negros y el envejecimiento de la dermis será más rápido, ya que se acumularán mayor cantidad de bacterias negativas sobre la superfície que desencadenarán en la aparición de radicales libres produciendo un envejecimiento de nuestra piel a una edad más temprana.
En definitiva, ¿En qué se traduce incorporar a nuestro ritual matinal la limpieza del rostro?
El resultado es una piel limpia, sana, bella y libre de impurezas.
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