Las bodas en la peluquería

Sin duda, la temporada de las bodas es una de las más importantes para el negocio de los salones de belleza y peluquerías. Son además un formidable escaparate para el trabajo de estilistas y maquilladores.

Los invitados querrán estar perfectos ese día, pero las novias son las grandes protagonistas, las que pondrán todo su empeño en estar radiantes. Hemos recopilado la opinión y los consejos de tres grandes expertos en la materia para que sirvan de guía actualizada para que tus clientas se sientan resplandecientes en una jornada que recordarán toda la vida.

Mabel Silva, de Style & Art y formadora, recuerda sin ambages que “una peluquería es una empresa y como tal ha de utilizar todas las oportunidades de negocio que pueda desarrollar.” Por su parte Juan Ramírez, peluquero y maquillador, formador de Fama Fabré enfatiza que una boda no solo es un servicio más de la peluquería, sino también una gran oportunidad de promocionar el saber hacer y la profesionalidad del peluquero. En efecto, Juan Inglés de Inglés Estilistas nos recuerda que una boda se puede convertir en una pasarela indirecta y por lo tanto un escaparate dónde poder exhibir las creaciones de un peluquero. “Nosotros somos especialistas en peinados de novia y de fiesta y a nuestro salón acuden personas que no son clientes sólo para asegurarse de que su imagen será impecable el día de la boda o del evento”. En estos casos, Ramírez aconseja que la peluquería que destaque principalmente en recogidos debería promocionarse como especialista, publicitando en su propio salón con imágenes temáticas, colaborando y formando equipo con asesores de imagen, diseñadores y empresas organizadoras de eventos y bodas.

Cómo atender a las novias

Para Mabel el protocolo es escuchar, indagar, tratar de entender y, por último, proponer. Cada novia es un caso diferente e implica un desafío apasionante. Lo ideal es planificar todo el proceso desde el momento en que se saben las fechas del evento. Ramírez aconseja realizar un estudio morfológico, de visagismo, conocer el estilo y las necesidades de la novia. Más en concreto el profesional de la peluquería debe conocer el estilo del vestido, escote y color que va a llevar. También es importante saber si el evento es de día o de noche. En el salón de Inglés Estilistas se cita a las novias con tiempo y antelación suficientes para realizar un estudio de lo que necesita en peinado y maquillaje. El objetivo es planificar los tratamientos necesarios para que el cabello y la piel estén resplandecientes el día del evento. A veces se precisa preparar un postizo o un tocado especial… Normalmente con un mes de antelación es suficiente para realizar todas las pruebas de peinado, maquillaje para que el resultado sea el óptimo.

El peinado

En opinión de Juan Ramírez los peinados deben ser únicos. Mabel Silva insiste en que la comunicación debe ser fluida con la clienta para captar la imagen de novia que desea transmitir: clásica, romántica, sensual o incluso transgresora. A ello se ha de añadir el estilo de vestido, maquillaje, uñas, tocado… Afortunadamente, Silva añade que “hoy en día disponemos de extensiones, rellenos, apliques, herramientas y técnicas para cualquier transformación”.

En Inglés Estilistas aconseja el estilo de novia dependiendo de su morfología y del estilo de vestido y sobre todo del escote. Se debe tener en cuenta la estatura, la fisonomía, el estilo de cabello y la morfología para que el conjunto resulte armónico. “Nosotros recomendamos a la novia lo que mejor le sienta independientemente de que esté moda o no”.

Sus complementos

Mabel Silva señala que lo fundamental es el conjunto, cada detalle debe realzar el resultado final, sin que nada acapare la atención. Ramírez se muestra partidario del menos es más. Él recomienda alguna joya a conjunto como collar y pulsera, flores iguales a las del ramo… En Inglés Estilistas realizan ellos mismos los tocados adaptados a los recogidos, los cuales pueden ser minimalistas o recargados. Un buen tocado colocado estratégicamente realza el peinado. En primavera, los tocados suelen ser florales y alegres, mientras que en verano se opta por elementos artificiales puesto que el calor marchita las flores. Si la boda es de día, el tocado será más sencillo y natural, mientras si la boda es de noche habrá más pedrería y sofisticación.

El maquillaje

En general, se prefieren los maquillajes naturales para dar una imagen romántica. En estilos más personales se optan por dar protagonismo a los rasgos más particulares: ojo o labios, nunca los dos a la vez, advierte Mabel Silva. Si la boda es de día habrá tonos naturales, neutros, transparentes seleccionados en función de la fisonomía de la novia (color de piel, cabello, ojos…) Por la noche será más acentuado con un fondo que cubra más, pestañas postizas, ahumados en los ojos. Se ha de tener presente que la luz artificial suaviza los tonos y los flashes de las cámaras atenúan los excesos, concluye Juan Inglés. Por último, Juan Ramírez recomienda preparar un kit para que se pueda realizar un retoque durante la jornada. “En muchas bodas se realiza un cambio más sofisticado para la fiesta después del banquete”.

Por Maite Aldazabal López Directora Editorial C&C MAgazine

Fotos:

peluquería ALEXANDER KIRYLIUK | maquillaje IRAMAKEUP | estilismo PATRYCJA JURASZCZYK | vestidos JESÚS PEIRÓ, RAIMON BUNDÓ |

accesorios ART JEWELLER | tocados Carmen Font | foto David Martínez |