De Sancho Estilistas
El lujo del espacio
por Magda Simó
El novísimo salón De Sancho Estilistas, situado en la confluencia de dos de las principales arterias de la Valencia comercial y burguesa, es un impresionante derroche de espacio y luminosidad que articula su interiorismo en base al binomio blanco y negro. El minimalismo se reinterpreta en locales como éste, donde no sólo la simplicidad es la clave de la decoración, sino que ciertos guiños a estilos menos minimal dan el toque justo de diseño y modernidad a espacios por definición sencillos y diáfanos.
Cuando se cuenta con espacio suficiente, todo es más sencillo en decoración, aunque como defiende de manera divertida Jorge de Sancho, artífice de este diáfano salón en pleno ensanche valenciano: “cuando ves el local vacío parece inmenso, pero cuando empiezas a distribuir las zonas buscando una cierta privacidad, es fácil que se te quede corto”. Pero no nos engañemos, un local comercial de 188 metros cuadrados da para mucho, por lo menos para distribuir las diferentes áreas con amplitud y diseñar un circuito de servicios que guarde la intimidad del cliente y mantenga la sensación de espaciosidad durante toda su estancia en el salón.
Ante la pregunta de por qué eligió el blanco y el negro como ejes decorativos del salón, aduce el impacto visual como principal clave de su elección: “Quería un salón que impactara, que no fuera habitual ver, y por suerte encontré una firma italiana de mobiliario como Maletti, que seguía en sus diseños las mismas ideas que yo tenía para mi salón”. De esa colaboración ha surgido un salón que parte del minimalismo para conseguir contrastes tan impactantes como el suelo negro satinado que se divide en el centro por una franja blanca, a modo de pasarela que conduce a los clientes desde la entrada hasta la zona de lavacabezas, haciéndoles protagonistas absolutos del salón. Sin duda, el color blanco es el primer impacto visual en De Sancho Estilistas, presente en paredes y mobiliario para hacer de la peluquería un remanso de paz. “El blanco es el color que mayor sensibilidad posee frente a la luz, aporta tranquilidad y confort. Es un color que te hace sentir libre y te hace olvidar las opresiones. Combinado con negro, transmite elegancia y sencillez. Son colores que no están sujetos a las modas y que no cansan visualmente”, explica Jorge de Sancho.
Desde la calle, sorprende la luminosidad y la limpieza de líneas que se aprecia a través del enorme escaparate acristalado. Una vez dentro, la modernidad, la innovación y la elegancia son tres de los atributos que definen este amplísimo salón, que se divide en seis áreas: zona de recepción y espera, zona de peinado, área técnica, zona de lavado, área de maquillaje y manicura y gabinete de estética.
El espacio de trabajo cuenta con siete tocadores en la zona de peinado, cada uno con leds de cromoterapia que permiten la relajación del cliente y un monitor individual donde se emiten desfiles de moda y noticias, y cuatro tocadores más en la zona técnica, un espacio semiprivado con cuatro sillones de diferente color y mesa propia para una mayor privacidad durante los servicios de coloración.
El cliente, protagonista indiscutible
La zona de lavacabezas es sin duda una de las áreas más mimadas en De Sancho Estilistas, centro de la experiencia sensorial que se vive al visitar la peluquería, por eso está situada al final de la pasarela marcada por los dos tipos de pavimento, en una zona separada, donde cuentan con tres lavacabezas diferentes, todos ellos tapizados en blanco y con masaje. En el centro se sitúa la pieza estrella del salón, un lavacabezas que se reclina totalmente poniéndose en horizontal y que ofrece un masaje de aire íntegro en todo el cuerpo. Como explica Jorge de Sancho, “la zona también se diferencia al tener distinto hilo musical que el resto de los espacios, con música más relajante, y además una iluminación regulable, para ofrecer un confort inolvidable”.
El capítulo de la iluminación es otro puntal imprescindible a la hora de hablar de este salón, porque se realizó un completo estudio de la distribución del local para conseguir contrastes lumínicos según las necesidades de cada zona de trabajo. Todo el salón está iluminado con luces de bajo consumo y destaca la luz indirecta que realza el efecto de la pasarela central. Mientras para el diseño de la iluminación se recurrió a un técnico especializado, para el interiorismo, por el contrario, no se contó con la ayuda de un interiorista, puesto que Jorge de Sancho tenía muy claro el concepto de salón que quería.
Como servicios complementarios, en De Sancho Estilistas cuentan con un sillón específico para maquillaje y manicura y con un gabinete de estética separado, donde se realizan todos los habituales servicios de belleza habituales y tambíen exclusivos tratamientos corporales de Alqvimia.
Toda esta suma de factores y la atractiva combinación de modernidad, innovación y elegancia, consigue que el flamante salón de Jorge de Sancho se perfile como uno de los salones que marcarán tendencia en Valencia en los próximos años. Como decía el claim publicitario de un anuncio televisivo de hace algunos años, ¿y si el verdadero lujo fuera el espacio?
